miércoles, 31 de diciembre de 2008

CIRO ROBERTO BUSTOS: EL GUERRILLERO FIEL.


CIRO ROBERTO BUSTOS: EL GUERRILLERO FIEL.

Cuando en el lejano abril de 1967 conocí detalles de la detención del argentino Bustos y de un francés (que nunca me interesó mucho) en Camiri empecé a cuestionarme quién era Ciro, quizá porque no era europeo. Siempre me interesó saber acerca de su persona, conocer detalles de su destino posterior a ser puesto en libertad después de cumplir una parte de la sanción que le había sido impuesta. Nunca supe más. Luego la rutina del trabajo me alejó del interés por el argentino.

Un hecho fortuito despertó de nuevo mi preocupación: una entrevista realizada por Hugo Montero para la revista Sudestada, llegada a mi con la ayuda de otro de mis hermanos argentinos, Diego Martín, el gastronómico que hace las mejores pizzas de Buenos Aires, (también en mi casa cubana) según me dice Bárbara su esposa, contacté a Hugo y por su medio a Ciro.

Hugo Montero solicitó autorización a Ciro Roberto Bustos para establecer el contacto y unos días después recibí un mensaje del polémico argentino. Bustos se alegraba de la preocupación de un cubano de la Isla por su persona, sin embargo, el que tenía motivos para alegrarse era yo, sencillo profesor de Historia, que finalmente se comunicaba con el Héroe, ahora residente en Suecia. Su primer mensaje, que publico sin su autorización, fue este:

Estimado Sr Aristides:
La revista Sudestada ha tenido la gentileza de reenviarme su mail, en el que Ud manifiesta su deseo de tomar contacto conmigo, aparte de conceptos que le agradezco. Le respondo sin resquemores por ser Ud compatriota de mi pasado; amigo de Alberto, e interesado en aclarar la historia tan encapsulada en su tejido.
Antes que nada, debo decirle que todo lo que yo puedo decir ya está dicho, en mi libro "El Che quiere verte" No dispongo de ejemplares, pero en Google hay librerías que lo envían en una semana. Y puedo agregarle que desde que fue editado --desde que lo escribía-, era mi deseo que personas de allí, lo leyeran: Furry y los Albertos, Castellanos y Granado. Y Aleida. Si Ud puede, le adjudico el encargo. ( hay que tener en cuenta que he sido ignorado, arrojado en el index).
Sin más, lo saluda cordialmente,
Ciro
18 de mayo de 2008.

No voy a cometer la ingenuidad de negar que el mensaje me produjo un inmenso placer: Ciro me había dedicado unos minutos y dado una tarea que podría cumplir fácilmente pues los dos Alberto son mis amigos personales.

Me interesé por detalles y Ciro siempre me respondió de manera cada vez más cálida y amistosa. No ignoraba, ni ignoro, el papel atribuido a Ciro de haber traicionado al Che. Nunca lo he creído. La mirada de Ciro me parece limpia, pura, digna.

Hay otra cosa, mucho menos subjetiva, tengo un amigo que estaba en prisión en Argentina, mientras Ciro estaba prisionero cumpliendo la condena impuesta. Ese amigo y otros amigos de mi amigo que formaban la red urbana de apoyo a la guerrilla no fueron molestados. Mi amigo no fue identificado y si hace 3 horas y 19 minutos hablé con él, es entre otras cosas porque Bustos no lo delató. Ni a nadie.

Ciro debió haber sufrido mucho la muerte del Che allá en la prisión en donde extinguía la condena que le había sido impuesta, pero su conciencia estaba tranquila…y 40 años después lo sigue estando.

En este diciembre de 2008 se cumplirán 38 años de que Ciro fuera amnistiado por el gobierno del Presidente Juan José Torres (diciembre de 1970) General que fue desplazado del poder poco después por Hugo Banzer.

La señora Elisabeth Burgos, esposa del no mencionado periodista francés, alegó:
-El único que habló fue Bustos.
La comprendo, si yo hubiera estado en semejante situación, Odalys, mi esposa habría actuado igual…por solidaridad pero sin ética.

Este es el inicio de lo que escribiré sobre quién es hoy mi amigo Ciro Roberto, que está allá en un gélido clima, con algún problema de salud que le impide caminar sus acostumbrados 8 kilómetros, pretendidamente ignorado por muchos, odiado por otros, desconocido por unos cuantos, pero apreciado por los que creemos en la honestidad de los Hombres entre los que él ocupa un lugar de Honor.

Para ti, Bustos, y tu familia el deseo de que te recuperes pronto y de que ellas tengan también mucha salud y alcancen sus metas en el nuevo año, entretanto, aquí está este apasionado de la figura del Che y de todo lo que se le relacione y valga, para rendirte homenaje a sabiendas de que un hombre del Che, como tú, sigue hasta la victoria siempre.
Arístides Rondón Velázquez.
Santa Clara, Jueves 25 de diciembre, 11.49 pm.

martes, 23 de diciembre de 2008

HE RECIBIDO A UN ARGENTINAZO....










HE RECIBIDO A UN
ARGENTINAZO.
por:Arístides Rondón Velázquez

Alex Wall me dio detalles acerca de la visita que haría a Cuba Martín Sharples, un hombre que a pesar de sus limitaciones físicas resulta impresionante, llegó a la Ciudad del Che, pasó por la Plaza Ernesto Guevara, siguió hasta mi casa, procedente de La Habana, con escala en Playa Girón, luego de haber recorrido en su bicicleta 477 kilómetros, sin dar la mas mínima muestra de cansancio. Ese gesto constituyó su homenaje al 50 aniversario del Triunfo de la Revolución Cubana.

Conversamos, asistió esa tarde a un cumpleaños infantil donde aceptó un pequeño brindis y contó a los niños sus impresiones en la forma más comprensible. Había viajado desde la escuelita de La Higuera en donde fue asesinado el Che, hasta Buenos Aires, llegó a la Plaza de Mayo y de allí continuó viaje hasta la Plaza de los dos Congresos en donde en el kilómetro 0 totalizó 3 143 kilómetros. Era el 9 de diciembre de 2007, había salido de La Higuera justamente 2 meses antes.

Hubo otro recorrido interesante fue el que realizó desde Buenos Aires hasta Rosario el 14 de junio de 2008 para celebrar el 80 cumpleaños del Che. Esto es una proeza pero si quien lo hace es un impedido físico, entonces ya no sólo es tal: es una hombrada.

Martín es un patriota pues ha dedicado su acción no sólo a honrar al Che sino también a sus decenas de miles de compatriotas desaparecidos, especialmente Julio López cuya aparición con vida demanda, así como otras causas justas. El más ilustre de mis amigos argentinos será siempre don Ernesto Guevara Linch, pero el más tenaz será siempre Martín Sharples.

Hay hechos que lo identifican tal cual es: ante la disyuntiva de visitar una de las Playas más lindas del mundo, Varadero, o Playa Girón se fue a Playa Girón a rendir homenaje a los centenares de víctimas que una invasión organizada por el gobierno de Estados Unidos de Norteamérica en abril de 1961, entonces yo estaba alfabetizando y él demoraría 5 años en nacer. Obviamente Martín no es de los turistas de Varadero, los que tienen mucha guita y no entran en contacto con el pueblo que ha sido sometido a casi 50 años de bloqueo por USA, él lo hizo para nutrirse de sus aspiraciones y conocer sus anhelos.

El día 19 de diciembre yo debía impartir una conferencia a estudiantes universitarios en la Sala Caturla, de la Biblioteca Provincial Martí, en esta Ciudad de Santa Clara, allí estuvo Martín y recibió un homenaje cálido de los jóvenes que se sintieron impresionados por su fuerza de voluntad tanto que debió firmar decenas de autógrafos. En ese lugar fueron expuestos al pueblo santaclareño las urnas que contenían los restos del Che y de sus compañeros. En el lugar exacto en donde estuvo la urna del Che se puso de pie respetuoso.

Hay, sin embargo, un momento de excepcional importancia en su visita al Memorial en donde descansan los restos del Che. Le indiqué el lugar exacto. Se situó delante de la efigie de su compatriota. Quedó mudo. Tocó el frío mármol en gesto de respetuoso saludo, rindió homenaje a los demás guerrilleros…pero volvió a situarse ante el Che, una Guía, por sugerencia mía se le acercó y le puso el brazo encima. Los ojos de Martín tenían un brillo que no volví a ver. Luego de unos minutos me dijo que había sentido una sensación de paz muy especial, que sus sentimientos aquí fueron opuestos a los percibidos en la escuelita en donde habló con la maestra Julia Cortés que alimentó al Che por última vez.

Hace muchos años leí una novela soviética de Boris Polevoi, titulada Un hombre de verdad, en donde se recrea la historia real de un piloto soviético derribado por el enemigo en los combates de la Segunda Guerra Mundial que perdió ambas extremidades inferiores y se propuso volver a volar y lo logró. Siempre admiré mucho al Piloto, tanto como ahora admiro a Martín. Estos hombres que tienen tanto coraje y fuerza de voluntad excepcional debieran ser más conocidos por todos, los niños de primaria que suponen que una tarea de matemática les es imposible hacerla, de de la Universidad que desaprueban y no insisten…los gobernantes que pudiendo carecen de voluntad. Nos hacen falta muchos hombres como Martín para cambiar el mundo.

Martín Sharples es ya otro de mis muchos hermanos argentinos, que no puedo mencionar, por fortuna, por ser larga la lista lo que me honra de manera extraordinaria. Este hombre sencillo y grande se va conociendo a este pueblo, a lo mejor de este pueblo, incluido uno de sus héroes el Coronel Juan Alberto Castellanos Villamar, Héroe de la guerrilla de Masetti, grande, sencillo también y accesible siempre para la familia guevariana, ha compartido con los pobres de esta tierra, que ya no lo somos tanto, apreciado sus problemas y visto su hospitalidad. Martín no es un turista extranjero, es un hermano argentino que es otra cosa.

Agradezco su gentileza y confianza pues me ha dejado bajo custodia su querida bici, llamada Pata Loca, que junto a la prótesis que lo acompañó en 3 960 kilómetros estará alguna vez expuesta al público aquí, entretanto voy a mi trabajo en Pata Loca, a veces, burlándome de mi menguada próstata de 64 años, incumpliendo las indicaciones de Guille mi urólogo, pero sobre todo rompiendo el bloqueo yanki que nos ha afectado el transporte en grado sumo.

Un pueblo que de hijos de la estatura moral de los argentinos que conozco merece un protagonismo muy activo en este mundo convulso que nos ha tocado, por suerte, para arreglarlo y dejar a nuestros hijos el mundo mejor, que es posible según Ignacio Ramonet y yo también lo creo así.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Fidel Castro Ruz y el desarrollo de las ciencias en Cuba, después de 1959. Síntesis para un homenaje.

La preocupación de Fidel Castro por el desarrollo de las ciencias en Cuba es el resultado de la necesidad que él siempre ha tenido de trabajar para mejorar la calidad de vida de los seres humanos, por otra parte no es ocioso consignar que su preocupación ha estado muy alejada de buscar resultados sólo para los cubanos, desde siempre su meta fue mucho mas allá de las fronteras de nuestro archipiélago y su proyección ha tenido alcance internacional.

Al producirse el brutal golpe de estado del 10 de marzo de 1952, Fidel Castro demuestra no solo sus condiciones como estratega político sino también su dominio de las Ciencias Jurídicas que en Cuba tienen exponentes de la talla de Céspedes y Agramonte, él acudió a acusar a Fulgencio Batista Zaldívar ante el Tribunal de Urgencias , pues consideraba el cuartelazo como un hecho delictivo, quien no tuviera una percepción clara de este hecho habría recurrido a la Sala de Garantías Constitucionales, lo que significaría que aquel golpe brutal a la democracia era un hecho anticonstitucional no un delito común, al fundamentar sólidamente su acusación demostró que el Tirano debía recibir una sanción de decenas de años.

Su acusación no prosperó porque el Poder Judicial, tanto como el Legislativo no rechazaron aquel acto bárbaro sino que lo secundaron en buena medida para conservar sus prebendas. Cuando Fidel Castro fue sometido a juicio por los sucesos ocurridos en Bayamo y Santiago de Cuba solicitó al Tribunal que lo juzgaba se le permitiera defenderse alegando su condición de abogado. El Tribunal accedió a la petición y se produjo la autodefensa más trascendental en la Historia de Cuba y de América.

El alegato de autodefensa de Fidel Castro está considerado por los más experimentados Juristas de todo el orbe como una obra excepcional. Fueron tan sólidos los argumentos esgrimidos por el acusado que este muy pronto se convirtió en acusador. Hoy ese documento es objeto de estudio por parte de juristas, historiadores, filósofos, políticos, literatos etc. De ese texto pronunciado el 16 de octubre de 1953 es esta sustanciosa apreciación:

Nuestro sistema de enseñanza se complementa perfectamente con todo lo anterior: ¿En un campo donde el guajiro no es dueño de la tierra para que se quieren escuelas agrícolas? ¿En una ciudad donde no hay industrias para que se quieren las escuelas técnicas e industriales? Todo está dentro de la misma lógica absurda: no hay ni una cosa ni la otra. En cualquier pequeño país de Europa existen más de doscientas escuelas técnicas y de artes industriales; en Cuba no pasan de seis y los muchachos salen con sus títulos sin tener donde emplearse. A las escuelitas públicas del campo asisten descalzos, semidesnudos y desnutridos, menos de la mitad de los niños en edad escolar y muchas veces es el maestro quien tiene que adquirir con su propio sueldo el material necesario. ¿Es así como puede hacerse una patria grande?

Se ha escrito mucho acerca del discurso de Fidel en que predijo que el futuro de Cuba tenía que ser un futuro de hombres de ciencia, pronunciamiento hecho en enero de 1960, sin embargo en la mente de Fidel estaba esa idea y muchas más, obviamente, desde los días en que preparaba las acciones de 26 del julio de 1953 en Bayamo y Santiago de Cuba, pues los dos hombres que se quedaron con él tratando de evadir el cerco y llegar a lo mas intrincado de la Sierra Maestra Oscar Alcalde Valls y José (Pepe) Suárez Blanco, capturados en horas de la mañana del 1 de agosto de 1953, así como también Faustino Pérez y Universo Sánchez que lo acompañaron después de la dispersión de Alegría de Pío el 5 de diciembre de 1956, perseguidos de cerca, hostigados por el enemigo, el hambre y la sed, todos coinciden que en aquellas condiciones Fidel les hablaba de lo que haría la Revolución una vez que hubiese triunfado para el desarrollo de nuestro país.

Cuando la Revolución Cubana llegó al poder el 1 de enero de 1959, y específicamente cuando Fidel Castro asume el Premierato, o sea, la Jefatura del Gobierno, en febrero de 1959, se enfrenta a la carencia casi total de potencial científico y al abandono total por parte del Gobierno anterior a este sector, por ejemplo, la Academia de Ciencias, antes de enero del 1959, adscripta al Ministerio de Justicia contaba con una subvención estatal de sólo 500.00; en tanto la Sociedad Geográfica al Ministerio de Estado (Relaciones Exteriores) y el Observatorio nacional a la Marina de Guerra, contaban con muy escasos recursos.

El Gobierno Revolucionario presidido por Fidel Castro, subordinado al Jefe de Estado Dr. Manuel Urrutia Lleo, debió enfrentar la reticencia de este pero le fue posible delinear el desarrollo técnico y científico del país, cambiar planes y programas de estudio en el nivel superior para preparar personal calificado en las 3 únicas universidades con que contaba el país, entonces, además de la Universidad de Villanueva, las transformaciones debieron ser fabulosas en medio del asedio yanqui y de los enemigos internos decididos a no ser desplazados.

La década de los sesenta fue especialmente significativa para Cuba, por razones de todos conocidas. En enero 15 de 1960 se celebra un Acto Solemne presidido por Fidel Castro celebrando el XX Aniversario de la fundación de la Sociedad Espeleológica de Cuba el cual tuvo lugar en la entonces Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales, acto en donde Fidel recibe la categoría de Socio de Honor.

Este discurso ha trascendido de manera especial porque, por primera vez Fidel expone, desde su alto cargo como Jefe de Gobierno, el valor que él le concede a la Ciencia y el papel que puede desempeñar en nuestro desarrollo, rinde homenaje al Científico Dr. Antonio Núñez Jiménez, el Geógrafo atropellado por la dictadura de Batista, y expresa textualmente:

El futuro de nuestro patria tiene que ser necesariamente un futuro de hombres de ciencia, tiene que ser un futuro de hombres de pensamiento, porque precisamente es lo que más estamos sembrando; lo que más estamos sembrando son oportunidades a la inteligencia, ya que una parte considerable de nuestro pueblo no tenía acceso a la cultura, ni a la ciencia, una parte mayoritaria de nuestro pueblo…
¡Cuantas inteligencias se habrán desperdiciado en ese olvido, cuantas inteligencias se habrá perdido!

Obsérvese que estas palabras son pronunciadas sólo un año después de haber triunfado la Revolución Cubana y el Visionario profundo que es Fidel Castro refiere que el futuro de Cuba tiene que ser necesariamente de hombres de Ciencia y de pensamiento, aspecto este último que se ignora y solo se dice que habló de hombres de ciencia cuando la realidad es que dijo hombres de ciencia y hombres de pensamiento, escamotear esta palabra resta alcance y trascendencia a un planteamiento hecho antes de llevarse a cabo la Campaña de Alfabetización, o sea, en un país con casi un millón de analfabetos, en una población de 6 000 000 de habitantes de los cuales sólo el 56 % poseía electricidad. Era una concepción futurista.

Este planteamiento y los logros que en las ciencias fuimos alcanzando y que reseñaremos de forma breve más adelante, al haberse demostrado de manera fehaciente lo afirmado 30 años atrás se decidió en 1990 festejar el 15 de enero de cada año el Día de la Ciencia Cubana.

Sobre el desarrollo de la ciencia en Cuba y la personalidad de Fidel Cstro la Dra. Lidia Turner Martí recuerda que en 1960 en un acto efectuado en el teatro del MINFAR Fidel les insistió en la necesidad que tenía el hombre de utilizar al máximo esa capacidad que poseía refiriéndose al cerebro, idea sobre la que ha vuelto al expresar que del cerebro sólo usamos el 1 %. Expresa la Dra. Turner Martí que le dio mucha importancia al desarrollo de las potencialidades del hombre.

Fidel fue uno de los artífices del desarrollo ganadero en Cuba, presionado por la necesidad de alimentar a todo el pueblo, en 1961 en un Acto Oficial en la Escuela nacional de Inseminación Artificial en el Cotorro expresó:

No quiero decir que…vamos a obligar a todo el mundo a que use la inseminación artificial en la ganadería, no; no quiere decir que nosotros, a un guajiro que no crea de ninguna manera, lo vayamos a obligar a inseminar una su vaca… El problema está en la aplicación masiva del método allí donde las condiciones lo permitan…La inseminación es algo probado por la ciencia , y no es una cuestión de superstición; lo que hay es que aplicar la técnica correcta y los procedimientos prácticos correctos.
Por aquellos días fundacionales Carlos Rafael Rodríguez le expresó que estaban preparándose para incorporar 200 jóvenes para introducir la Inseminación Artificial en Cuba a lo que el Comandante respondió de inmediato:
- 200 no, 1 200.
Lo cierto es que desde 1946 se había introducido en Cuba la Inseminación Artificial pero en forma sumamente limitada.
Como resultado de esa visión y aplicación consecuente de la Ciencia ya en 1962 se graduaron los primeros Técnicos, con la participación de Fidel se compraron en Canadá 35 000 ejemplares de razas muy seleccionadas, así como sementales cuyo costo por cada ejemplar era de 25 000 dólares por ejemplo Rosafé Signet, Holstein, hoy serían millones de dólares. Es bueno recordar los elevados logros de la ganadería cubana y la millonaria producción de leche y carne alcanzada por aquellos tiempos en que contábamos con los recursos necesarios, y sin duda, mayor estímulo por el trabajo.
Rosafé fue sacrificado por indicación de Fidel para que no sufriera y yace enterrado en el centro de investigación en que estaba situado, 4 ó 5 horas después llegó Fidel y sólo preguntó si el animal había sufrido.

Fidel controlaba todo este trabajo que trajo como resultado que el país poseyera en 1966 hasta 1 200 000 vacas en el plan de inseminación para lo cual se inauguraron 15 centros desde Baracoa hasta La Habana. Debiera recordarse que como resultado de la aplicación adecuada de la ciencia se produjo el fenómeno excepcional de la aparición de una vaca que produjo en un día 107, 8 litros de leche en tres ordeños el valioso ejemplar fue atendido por el Instituto de Ciencia Animal y de manera personal por su Director , Doctor Arabel Elías Iglesias por expresa indicación de Fidel, el día que Ubre Blanca produjo la cifra antes mencionada fueron a visitarla 39 periodistas especializados procedentes de distintos países. Este valioso ejemplar es el resultado de la política de cruzamiento y del sistema de alimentación desarrollado por la ciencia cubana por indicaciones de Fidel, entre los científicos que alcanzaron ese nivel de desarrollo en Cuba está el Dr. Alberto Granado Jiménez, eminente bioquímico.

Un proceso similar al anterior se produjo en la rama pesquera, Fidel siguió de cerca la creación de la Flota Pesquera, según opinión del Doctor Carlos A Carlés Martínez el estudio del camarón, la langosta, el atún, peces sin escamas etc, creándose el Dpto de Bioquímica y Oceanografía, cuba solicitó y obtuvo colaboración de la FAO, así como también de expertos soviéticos. Poco tiempo después se fundó nuestro Instituto de Oceanología.

En 1963 se crea la Flota del Golfo con 13 barcos Lambda de madera, sin embargo ya en 1967 contaba con 95 barcos y otras embarcaciones. Fidel había orientado desarrollar la Construcción Naval al tiempo que se reunía con los pescadores para oír las opiniones de los mismos como resultado de todo este trabajo nació el Cayo Largo que ha sido el mejor barco construido en Cuba según opinión de expertos.

Al hablar del desarrollo de las Ciencias en Cuba es imprescindible señalar que antes de 1959 en Cuba no había desarrollo científico, lo cual no decimos nosotros sino que está documentado en un Informe Oficial de la Misión Truslot, que enviada por el gobierno de Estados unidos estudió nuestra situación en 1953, y le sugirieron al dictador Batista crear una institución de este tipo por lo que creo el Instituto Cubano de Investigaciones Científicas, en donde en realidad había científicos cubanos de alto nivel pero allí lo que se trataban eran asuntos burocráticos y administrativos, luego fue convertido por el Che en Instituto Cubana de Investigaciones de los derivados de la Caña de Azúcar, considerando que en el futuro los derivados de la caña de azúcar podían ser más importantes que la misma…la vida lo ha demostrado y no precisamente con el etanol.

En 1962 se creo la Comisión Nacional de la Academia de Ciencias de la República de Cuba conforme a lo expuesto por la Ley 1011 de 1962 la que tenía el objetivo de dirigir, planificar y promover las investigaciones científicas, lo que permitió fomentar y organizar una amplia gama de instituciones de investigación que abarcaran las ciencias naturales y sociales y, además, las agrarias y las técnicas. Al respecto Fidel Castro refiere en el Informe al Primer Congreso del Pardito Comunista de Cuba en diciembre de 1975.

La investigación científica y técnica era de hecho desconocida en el país. En 1958 la educación superior no preparaba para satisfacer las necesidades del desarrollo y mucho menos las actividades de investigación. La urgencia de la revolución científica y técnica en el proceso revolucionario condujo al desarrollo de la actividad científica en diversos organismos y la fundación de la Academia de Ciencias en 1962.

El año 1964 fue nombrado Año Internacional de la Calma Solar por instituciones científicas de todo el mundo, en ese año las ciencias en Cuba tuvieron notable desarrollo pues se creó el Departamento de Geofísica en la Academia de Ciencias y posteriormente el Instituto de Geofísica y Astronomía para fomentar las investigaciones sobre el magnetismo terrestre, la ionosfera, las corrientes telúricas, las radiaciones cósmicas y la propagación de ondas cortas entre otras tareas. Fidel seguía muy de cerca de la vez que contribuía a la concreción de las investigaciones.

Es igualmente el año en que se fundaran los Institutos Pedagógicos Frank País en Santiago de Cuba, Félix Varela en Santa Clara y Enrique José Varona en La Habana, anexos a las Universidades de esas respectivas ciudades.

También es este el año en que Fidel funda las Brigadas Técnicas Juveniles estructuradas en fábricas, talleres y luego en los diferentes centros científicos para posibilitar la superación continua de los jóvenes mediante cursos y jornadas científicas que generan el intercambio de conocimientos.

Acerca de la creación del Centro Nacional de Investigaciones Científicas a mediados de los sesenta la desaparecida Doctora Rosa Elena Simeón Negrín expresó:

-¿Qué le pidió Fidel a la Universidad? Que creara una Institución con la tecnología más moderna, incluyendo la que provenía de los Estados Unidos si podíamos entrar. Ya establecido como institución sus especialistas investigaron todo lo relacionado con el cultivo del arroz…se formó una comisión que creara un centro especial con el objetivo de contrarrestar las agresiones a los cultivos que nos obligaban a investigar y buscar soluciones
A prepararnos para solucionar o prevenir. ¿Qué peso tenía? El peso de la vida y la muerte…se revitalizó el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí para las enfermedades humanas. Fidel dijo: Me buscan lo mejor del mundo. Se visitaron 42 instituciones y 11 países por una delegación que presidió el ya fallecido Dr. Roberto Ortiz

Otro terreno de la Ciencia en que la influencia de Fidel es incuestionable es el campo de la Meteorología, hasta 1958 prácticamente en Cuba había un solo meteorólogo el muy recordado capitán José Carlos Miyás, en la actualidad y bajo la supervisión personal de Fidel, que se hizo más intensa después del huracán Flora que devastó el oriente del país y causó mas de un millar de muertos, existe una red de 70 estaciones meteorológicas, atendidas por casi 1 200 trabajadores de los cuales 300 son graduados universitarios, 170 ostentan categoría científica y 30 son doctores en ciencia. La eficiencia de este trabajo se evidencia en que la efectividad de sus pronósticos alcanza el 90 %.

El nivel de conocimientos que posee el pueblo de Cuba en este ámbito se le debe fundamentalmente a Fidel Castro que demostró haberse convertido en un experto en esta materia por la trascendencia que estos eventos tienen para los seres humanos y los recursos materiales. Su conocimiento científico y su experiencia le permitieron alertar al mundo sobre los efectos del cambio climático y otros fenómenos que están poniendo en grave riesgo la supervivencia de la humanidad.

En nuestra provincia hay muchos ejemplos de la labor realizada por Fidel en su desarrollo científico un ejemplo es el INIVIT ubicado en el municipio de Santo de Santo Domingo y al cual Fidel visitó el 7 de abril de 1991 dejando orientado que era necesario diversificar la fuerza laboral alegando que los problemas de la agronomía no lo podían resolver sólo los agrónomos, que era necesario buscar cibernéticos, biólogos… nos dimos cuenta que tenía la razón, expresa el Doctor Sergio Rodríguez

Según una muy gráfica valoración del célebre Gabriel garcía Márquez, sobre su amigo personal Fidel Castro este es sólo capaz de concebir ideas descomunales, el siguiente ejemplo puede graficar esa idea.

En 1969 Fidel planteo a un grupo de ingenieros en la CUJAE, la posibilidad de diseñar y construir una computadora digital, Orlando Ramos y Luís Carrasco los cerebros creadores de esa computadora, proyecto en el que trabajaron, además, casi 30 compañeros, más de un año. En ese tiempo fueron algunos especialistas a Japón encontrando algunos inconvenientes de tipo tecnológicos que fueron capaces de resolver. Esa primera computadora fue concluida en horas de la madrugada del 18 de abril de 1970, y por indicación de Fidel su primer programa se aplicó en el control del tráfico ferroviario cañero en la zafra de 1970 en el Central Camilo Cienfuegos.

Aun a riesgo de ser descalificado expongo que un pueblo realmente laborioso, cuando es en verdad motivado, como el nuestro, con un Jefe como Fidel Castro, y sin el hostigamiento de que nos ha hecho víctima Estados Unidos por 50 años nuestro archipiélago exhibiría hoy resultados que no podemos ni siquiera imaginar.

A través de todos estos años de Revolución en el Poder los cubanos hemos alcanzado un nivel científico tan elevado que en el Plan Busch queda explícitamente señalado que un país pobre como el nuestro no puede sostener las Instituciones de Investigaciones Científicas creadas por el gobierno cubano dado el alto costo de las mismas porque son privativas de países desarrollados, no existe duda alguna de que les provoca gran irritación el nivel científico alcanzado por Cuba Revolucionaria, de lo que hacemos sólo una reseña brevísima hecho reseña.

El 18 de setiembre de 2008 se cumplieron 28 años de que se produjera el primer vuelo al cosmos, tripulado por un cosmonauta latinoamericano, se trataba del entonces Teniente Coronel Arnaldo Tamayo Méndez, cubano, y el soviético Yuri Romanenko. El hoy General Tamayo Méndez integraba un grupo de 50 pilotos cubanos formados en la URSS y de los cuales se fue haciendo la preselección hasta quedar sólo Arnaldo y José Armando, cualquiera de los dos podía ser el cosmonauta.

El vuelo duró 8 días realizado a una altura de entre 350 y 400 kilómetros, una velocidad orbital de 29 000 kilómetros por hora que les permitía un período de rotación cada 90 minutos. Tamayo declaró a su regreso a Cuba que fue despedido por Raúl Castro él que le expresó en nombre de Fidel que cuando regresara iba a ser un hombre extraordinariamente famoso, por lo que no podía olvidar el criterio Martiano…toda la gloria de un hombre cabe en un grano de maíz.

Este vuelo cósmico permitió realizar 27 experimentos físico-técnicos y médico-biológicos diseñados por científicos cubanos. Al respecto expresó Fidel Castro el 27 de setiembre de 1980, un día después del regreso exitoso de la nave cósmica, conforme a todo lo previsto:

La Revolución significó para Tamayo lo que significó para decenas de miles de actuales médicos, ingenieros, investigadores, técnicos, administradores etc. Nuestra revolución hizo posible esa especie de milagro, porque recogió los mejores valores del pueblo, los educó y los desarrolló. Y Tamayo es, por ello, un orgullo para nuestro pueblo, ya que representa el espíritu de nuestra juventud, el valor de nuestra juventud, la honestidad de nuestra juventud y el heroísmo de nuestra juventud.

Hay, sin embargo, un período de la historia de Cuba que pudo ser superado por varias razones y entre ellas está el potencial científico que había creado la Revolución, se trata del denominado Período Especial en Tiempos de Paz, el que tiene su origen en la debacle del campo socialista que concluyó con la abrupta desintegración de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas en diciembre de 1991, quedando Cuba desde entonces entre dos fuegos, o sea, sometida a doble bloqueo, tanto es así que de más de 8 000 millones de dólares que importábamos de la URSS se reducen en 1992 a la cifra de 2 000 millones aproximadamente. En cuanto a exportación se reduce abruptamente también, la situación era tan grave que hasta los más avezados economistas dieron sólo semanas de vida a la Revolución Cubana.

Es imprescindible consignar que la máxima dirección del gobierno y partido cubanos no fueron sorprendidos por la caída del campo socialista pues Ernesto Guevara dejó escrito 27 años antes de que sucediera que esos países iban directo al capitalismo, idea que Fidel expone como posible de manera pública el 26 de julio de 1989 en Camaguey, fecha en que ya eran evidentes los problemas de Europa del Este y la URSS Cuba sin duda adoptaba medidas adecuadas pues en el campo de las ciencias había grandes perspectivas.

Aun en esas excepcionales dificultades bajo la dirección y estimulación directa de Fidel Castro se llevó a cabo un amplio programa inversionista hasta 1997 en el campo de la ciencia y la técnica logrando desarrollar una industria destinada a la producción de medicamentos y alimentos.

El 5 de enero de 1994 Fidel inauguró el Centro de Inmunología Molecular construido en 3 años, con muchos esfuerzos y deteniendo otras obras que también eran necesarias, así como también el Centro de Inmunoensayo, de estos esfuerzos es resultado un medicamento de fama internacional, conocido popularmente como PPG comercializado en varias naciones.

Al enumerar los logros alcanzados en el sector científico el Doctor Carlos A Gutiérrez Calzado expresa:
Aquí en el CNIC está ubicado el Centro de Neurociencias de Cuba, en el que se trabaja intensamente en la producción de equipos, más bien para el diagnóstico de enfermedades del sistema nervioso central: Neuronic, Medicid, Audix con resultados importantes. También existe una red de equipos de ozono y de PPG, del que tenemos potencialidad para fabricarlo con el fin de cubrir nuestras necesidades y las del mundo si fuera necesario.

En el momento que se redactan estas notas es posible mencionar decenas de logros de la ciencia cubana para beneficio gratuito de los cubanos, para colaborar con países que no tienen posibilidad de pagarlos y para venderlos a numerosos países en que nuestros productos tienen un gran demanda, países como China e incluso Estados Unidos son beneficiados con los logros de la Ciencia Cubana que ha producido medicamentos únicos en el mundo a los cuales les es muy difícil imponerse en el mercado mundial dado el conocido control que sobre el comercio de los mismos ejercen las transnacionales, sobre todo, norteamericanas, que tienen una concepción mercantilista al respecto ellos producen medicamentos para combatir las enfermedades en tanto Cuba lo hace para precaver que no aparezcan como sugería José Martí.

El número de Científicos cubanos es superior a los 50 000, los cuales organizaron el Sindicato de la Ciencia a solicitud de Fidel Castro que expresó:
…la ausencia de un sindicato que agrupe a todos los científicos es inadmisible, mucho menos en este Período Especial.

Existe el Sindicato de la Ciencia que cuenta con 936 Secciones Sindicales, de ellas 537 con doble afiliación por pertenecer además a nuestro SINTCD en donde no existe ninguna incompatibilidad.

Dentro de las agresiones más salvajes de que hemos sido objeto los cubanos está la introducción del Dengue Hemorrágico por parte de Eduardo Arocena (Jefe del grupo terrorista Omega 7 radicado en Miami según su propia confesión). Fidel encabezó la lucha de nuestros científicos, contra esta pandemia que nos costó 158 víctimas fatales, de ellos 101 niños, tuvimos 116 143 mil ingresos hospitalarios, y fueron afectadas en total 344 203 en total. Estados Unidos impidió que en ese país se nos permitiera adquirir lo necesario para enfrentar esa pandemia, aun cuando se hacía mediante la O.M.S. Si Cuba pudo evitar una catástrofe que habría afectado a millones y costado la vida de un número impresionante de personas fue por el potencial científico creado por la Revolución bajo la guía y estimulación de su Máximo Líder.

Por esos días Fidel Castro indicó que se creara en cada Hospital Pediátrico una Sala de Terapia Intensiva, dio un breve plazo, el Estado Cubano erogó un cifra millonaria, para esta inversión urgente que no estaba planificada.

Sólo unos mese s después de ser inaugurada la correspondiente al Hospital Pediátrico Octavio Concepción y de la Pedraja en Holguín uno de mis hijos, de 12 años, en medio de una tormenta recibió una descarga eléctrica que lo tuvo al borde la muerte más de 24 horas que para mí fueron siglos. Tal era su gravedad que en el urgente traslado al hospital le pregunté a la enfermera que me acompañaba ¿como lo ves? me respondió con dolor:

-Todavía respira.
La esmerada atención especializada recibida por mi hijo en aquella Sala de Terapia Intensiva, la eficaz y urgente valoración realizada en el Cuerpo de Urgencias por el Dr. Sanfield hicieron posible que mi hijo sobreviviera a aquel trance terrible. Tuvo allí no sólo un Especialista altamente calificado sino también los más modernos medios para salvarle la vida. Se salvó porque la Revolución Cubana puso a su disposición los mismos medios que se habrían utilizado en un país del Primer Mundo para el más adinerado de los pacientes.
Jorge siguió estudiando y participó en el 8 Congreso de los estudiantes de la Federación Estudiantil de la Enseñanza Media en condición de Delegado y allí pudo saludar a Fidel Castro y agradecerle personalmente sus desvelos por la salud del pueblo de Cuba. Era diciembre de 1989.
Hoy muchísimos años después mi hijo todavía respira y muy bien, él, su madre y yo le debemos eso a un hombre de Ciencias que se llama Fidel Castro. Fidel debiera respirar eternamente.

(Estas líneas son mi regalo de fin de año a tres Jorge Luís, Rondón, Muñiz y Noy Prado, mi médico)
Lic.Arístides Rondón Velázquez

jueves, 11 de diciembre de 2008

Estudio, desde un enfoque histórico, de las influencias educativas que contribuyeron a la formación del carácter y el pensamiento de Ernesto Guevara



Realizar una investigación histórica seria y desprejuiciada sobre una figura de la dimensión de Ernesto Guevara de la Serna es un empeño muy difícil, sin embargo, aceptamos el reto basándonos en un principio que él nos dejó claro: respeto total a la verdad histórica, sin influencias personalistas, ocultamientos y tergiversaciones. Guiados por ese principio y dejando claramente establecido que lo aquí expuesto está dirigido a especialistas que utilizarán esta información conforme a la capacidad y necesidad de los posibles receptores realizamos esta tarea que de seguro podrá ser ampliada.
A fines del siglo XIX unieron sus vidas Juan Martín de la Serna Ugalde y Edelmira de la Llosa los que viajaron a Berlín a principios del siglo XX con sus hijos: Carmen, Jorge , Juan Martín y Edelmira, allá les nació Sara. Después del regreso a Argentina nacieron Arturo y Celia, la menor, el 23 de junio de 1906, en las fuentes que nos ha sido posible consultar hemos apreciado que se mencionan distintas fechas pero con mínimas diferencias.
Juan Martín de la Serna Ugalde, padre de Celia se suicidó pegándose un tiro mientras estaba en su camarote durante otro viaje a Europa. Su cuerpo sin vida fue lanzado al mar conforme a lo estipulado en estos casos. En carta dejada a su hija mayor Carmen, no a la madre de sus hijos le expresó que el motivo de su drástica determinación era que padecía un mal incurable, la pequeña Celia tenía sólo meses de nacida.
La Señora Edelmira de la Llosa falleció en el año 1913, quedando toda la familia bajo la dirección de la hermana mayor Carmen que aun no había cumplido 20 años. Celia era objeto de sobre atención de parte de todos por el hecho de ser la más pequeña.
Se trataba de una familia de la aristocracia argentina, Juan Martín de la Serna Ugalde fue un destacado Jurista y Profesor Universitario, cercano colaborador de Hipólito Irigoyen personalidad relevante de la historia de la República Argentina en la que ejerció la Primera Magistratura en dos períodos, el primero desde el 12 de octubre de 1916 hasta 1922 y el segundo desde el 12 de octubre de 1928 hasta 1930 ocasión en que fue desplazado del Poder por un golpe de estado que llevó al poder a un militar. Ese golpe fue justificado por la imposibilidad de Yrigoyen de solucionar los graves problemas que provocaban la Crisis Económica iniciada en 1929.
Irigoyen, postulado por el Partido Unión Cívica Radical, había sido el primer Presidente de la República Argentina elegido democráticamente en 1916, período en que ejerció con gran apoyo popular. En 1921 decidió abandonar, soberanamente, la Sociedad de Naciones, formada entonces por 42 miembros y que se disolvió en 1946 dando lugar a una nueva organización mundial: la ONU.
La Señora Ana Linch, hija de Francisco Linch, argentino, nació y vivió en California, Estados Unidos de Norteamérica hasta haber cumplido los doce años momento en que regresó con su familia a Argentina, lugar que había tenido que abandonar su familia y radicarse en Estados Unidos porque el padre era víctima de persecución política por su negativa a pertenecer al Ejército del General Juan Manuel de Rosas, lo que significaba que sería objeto de la mas cruel represión por parte del tirano. Francisco Linch hizo fortuna en San Francisco de California en donde estuvo radicado 30 años y mantuvo su posición política contraria a la tiranía. Regresó a su patria después de esos 30 años de exilio, luego de caer el gobierno dictatorial de Rosas que se había extendido de 1843 a 1852.
Roberto Guevara, padre de Ernesto Guevara Linch, nació en California ya que su padre, y el resto de la familia fueron a esta parte del territorio norteamericano como emigrados políticos, procedentes de Chile en donde se habían refugiado inicialmente, desde allí realizaron una expedición a los Placeres de California , nombre que debe ser muy tenido en cuenta pues biógrafos mal intencionados han relacionado este nombre con prostíbulos, vinculándolos a Juan Antonio Guevara (bisabuelo de Ernestito) alegando que esa era la base de su fortuna. Puede tratarse de una interpretación equivocada pero Don Ernesto Guevara Lynch aclaró que se ha tratado de manchar la imagen de sus predecesores deliberada y malintencionadamente.
Roberto Guevara pudo cursar estudios en Buenos Aires y graduarse de Ingeniero Geógrafo en Córdoba, razón por la que le fueron encomendados importantes trabajos en 1898 por el gobierno argentino, como por ejemplo establecer el límite entre la provincia de Santiago del Estero y la Gobernación del Chaco, Roberto estaba auxiliado en su trabajo por soldados que lo defendían del ataque de la población aborigen que los creía enemigos. Realizó el trabajo en condiciones muy difíciles por no haber ríos, arroyos y tener que soportar un calor de hasta 48 grados.
El Ingeniero Guevara fue Jefe de la Quinta Comisión de Límites, en 1902, trabajaba en la cordillera de los Andes para dirimir el diferendo que existía entonces con Chile, era un dificilísimo trabajo realizado a varios miles de metros de altura sobre el nivel del mar. En 1902 inició la mensura (medidas) en la provincia de Mendoza, efectuar el catastro de esa zona inmensa le ocupó 15 años de duros sacrificios físicos y familiares, se trata de un territorio muy agreste afectado por ciclones, calores, lluvias torrenciales, enfermedades desconocidas por él y sus acompañantes, puna, por ejemplo, que es un malestar que se padece como resultado del enrarecimiento del aire a gran altura.
Entre sus compañeros debió sufrir la pérdida de algunos de sus hombres como es el caso del también Ingeniero el sueco Ebensen, que desobedeciendo los consejos de los Prácticos escaló un cerro, Los Tombillos, de 6 000 metros de altura para colocar en la cima una señal geodésica, sorprendido por una tormenta de nieve tuvieron que darlo por desaparecido a pesar de la intensa búsqueda efectuada con todos los recursos disponibles en esa época.
Ernesto Guevara Linch, hijo de Ana Linch y del Ingeniero Roberto Guevara tenía excelentes relaciones de amistad con Celia de la Serna y de la Llosa, hija Juan Martín de la Serna y Edelmira de la Llosa amistad compartida con todos los hermanos de Celia. En esta fecha sus padres habían fallecido y como se ha escrito antes eran seis los hermanos de Celia, tres varones y tres hembras.
Mientras la familia de la Serna observó que la relación de los jóvenes era solo amistosa no hubo dificultad alguna, sin embargo, cuando comprobaron que había algo más que amistad entre Celia y Ernesto se produjo una tormenta: ninguno de los hermanos de Celia aprobaba esa relación. Debido a que Celia era menor de edad no podía haber matrimonio porque sus hermanos mayores no daban su aprobación.
Celia era profundamente religiosa, se había formado en colegios de esa índole, e incluso era estimulada por las monjas del Colegio a tomar los hábitos, según opiniones autorizadas debido a las riquezas que poseía, creyente apasionada lo era a tal extremo que solía ponerse cuentas de vidrio en sus zapatos a manera de cilicio, o sea, como un suplicio voluntario.
Celia tenía entonces 20 años y Ernesto 27. Ella era una mujer muy culta que dominaba el idioma francés igual que su lengua materna, y manejaba con soltura la Lengua Inglesa. Ernesto era igualmente una persona de gran cultura y mucho mundo, al decir de Celia, había matriculado más de una carrera universitaria pero no concluyó ninguna, aunque se desenvolvió con éxito en la arquitectura e incluso en la Medicina.
Ambos jóvenes decidieron hacer con sus vidas lo que ellos creyeron conveniente sin importarnos un comino las charlatanerías mundanas, que eran usuales en los años iniciales del siglo XX, según afirmación de Don Ernesto en su obra Mi Hijo el Che.
Debieron actuar, obligados por las circunstancias, ya que no consiguieron convencer a los hermanos y hermanas de que aceptaran su decisión firme de casarse, por lo que se vieron obligados a ofrecerles un hecho consumado: Celia simuló haber huido con Ernesto para lo que contó con la complicidad de una tía de su madre, Doña Mercedes Lacroze Llosa, desde esa casa y con la mediación de Mercedes lograron su objetivo, se casaron el 9 de diciembre de 1927, con la asistencia sólo de de dos de sus seis hermanos y hermanas: Juan Martín y Jorge. En la crónica social del diario La Prensa del siguiente día está reflejado el acontecimiento.
La familia aceptó, obligada de esa manera, el matrimonio pero Celia debió recurrir a la justicia para lograr su herencia, sin embargo parte de las tierras que pertenecían a la demandante permanecieron en poder de la familia que alegó, a través de su Abogado, que las administrarían mejor, lo cual no es discutible. Por ese entonces ya Celia estaba embarazada.
Con el objetivo de alejarse de la mojigata sociedad a que pertenecían, por sus apellidos, decidieron salir de Buenos Aires y es cuando Ernesto y Celia compran 200 hectáreas de tierra en Puerto Carataguay, territorio de Misiones situado a 2 700 km de Buenos Aires, (hoy es una de las 23 provincias que forman la República Argentina) un lugar selvático, agreste, en donde Ernesto y sus peones construyeron una amplia casa, a orillas del río Paraná, rodeada de todo tipo de animales desconocidos, arrullados por el río y sin electricidad. Allí pasó Celia los siguientes meses de su embarazo bajo el cuidado de su marido y alguna empleada, conforme a las posibilidades que el difícil lugar permitía. Guevara Linch expresa en su libro Mi hijo el Che refiriéndose a aquellos parajes:
…aquella tierra llena de misterio, en donde desde el momento en que uno pisaba sus riberas sentía que la protección de su vida estaba en su machete o su revólver, influyó poderosamente en ella y debo suponer también que todo lo que pasase por su mente en aquellos momentos pudo influir sobre aquel ser que ella estaba gestando.
Ya para ese tiempo las ideas de Celia eran más terrenales y su evolución fue sin ninguna imposición de Ernesto, que sabía muy bien que de intentarlo no lo lograría, debido al firme carácter de aquella excepcional mujer.
En los primeros días de mayo de 1928, ante la inminencia del parto, Ernesto lo arregló todo y partieron hacia Rosario en donde un primo suyo médico los alojó en su casa y se ocupó del nacimiento del niño, hecho que se produjo en un Hospital, siendo inscripto con fecha 14 de junio de 1928, un mes exacto posterior al nacimiento real, fueron testigos del hecho el taxista brasileño José Beltrán y un primo de Guevara Linch, Raúl Lynch, marinero entonces, que a fines de la década de 1950 ocupaba un cargo diplomático en la Embajada de su país en La Habana desde donde brindó toda la ayuda que pudo a la familia Guevara de la Serna. En cuanto a la fecha de nacimiento referida hay desacuerdos. Yo festejo el cumpleaños del Che el mismo día que él lo hacía: 14 de junio. Sin embargo reflejamos la polémica fecha, lo cual carece de trascendencia.
Después del parto se establecieron en la casa situada en la calle Entre Ríos No. 480, en Rosario en donde permanecieron poco tiempo pues volvieron a Buenos Aires dijeron que el parto se había adelantado…por esos días llegaba a la Presidencia de la República Argentina Don Hipólito Irigoyen, para ejercer su segundo período como Presidente de la Republica Argentina, que había sido muy amigo y correligionario de Juan Martín de la Serna Ugalde, abuelo materno de Ernestito. Luego de su estancia en Buenos Aires el matrimonio regresó a Carataguay en donde estuvieron un tiempo limitado. Es importante consignar que en este lugar se comenta, por tradición oral, que en ocasión de que Ernesto viajara a Montevideo, Uruguay, como representante diplomático cubano a principios de la década de los 60, fue a aquel lugar en que pasó su más remota niñez, dato que no está documentado históricamente.
De ese tiempo Guevara Lynch nos narró un hecho que rebela rasgos interesantes del pequeño Ernestito: poco después de que el niño empezara a caminar el padre lo mandó a la cocina, distante cerca de 20 metros según escribió en Mi hijo el Che, en busca de mate la tradicional bebida de los argentinos, al niño se le interponía una zanja pequeña y al cruzarla se cayó, de mal humor regresó de nuevo a la cocina se volvió a caer y regresó de nuevo hasta que aprendió a salvar el obstáculo y cumplir la encomienda de su padre, hecho que recuerda lo expuesto por José Martí en 1889 en La Edad de Oro … las cualidades esenciales del carácter, lo original y enérgico de cada hombre, se deja ver desde la infancia en un acto, en una idea, en una mirada
Los obreros de aquellos lejanos parajes eran objeto de la más brutal explotación, pues a los mismos no se les pagaba con dinero, sino con vales que recibían por su trabajo y que solo tenían valor en el Comercio de los dueños que vendían productos de bajísima calidad por un precio diez veces más alto que el real. Los que se rebelaban eran perseguidos como cimarrones y castigados salvajemente cuando era posible. El matrimonio Guevara – Serna conoció muy de cerca la explotación a que eran sometidos aquellos hombres llamados Mensú, descendientes de los aborígenes encadenados a la protección de las antiguas misiones jesuítica españolas. Guevara Linch era el único hacendado que pagaba con dinero, razón por la cual fue calificado de comunista por los demás propietarios. Ernestito residió allí hasta 1931, o sea, menos de dos años, sin embargo sus padres le recordaban detalles de aquel lugar que sin duda le impresionaron de manera notable.
En 1931 el Astillero Río de Plata funcionaba con dificultades y como Guevara Linch era uno de sus propietarios decidió establecerse en sus proximidades de manera provisional para poder atender el negocio pues él pensaba regresar a Carataguay para seguir atendiendo su plantación de yerba mate y no abandonar un lugar en donde se sentían muy bien a pesar de las distancias. Se produce entonces un hecho que marcaría a Ernestito durante toda su corta vida. El lugar seleccionado fue San Isidro y es allí en donde el niño empezó a padecer asma y con él toda la familia a sufrir la angustia de ver a Teté víctima de ese dramático padecimiento, que enfrentó como un reto más. Su padre consideró que el asma de Ernestito surgió como resultado de la inexperiencia de Celia, lo que provocó tensiones en la pareja al respecto escribe en su libro Mi hijo el Che:
Nos gustaba mucho bañarnos en el río y en verano lo hacíamos casi todos los días en las playas del Club Náutico San Isidro. Una fría mañana del mes de mayo y además con mucho viento, mi mujer fue a bañarse al río con nuestro hijo Ernesto. Llegué al Club en su busca para llevarlos a almorzar y encontré al pequeño en traje de baño, ya fuera del agua tiritando. Celia no tenía experiencia y no advirtió que el cambio de tiempo era peligroso en esa época del año.
Hay un hecho que no debe ser ignorado y al cual no hace referencia Guevara Linch, antes de que a Ernestito se le diagnosticara asma él solía exponer el niño al aire fresco, a medio vestir, alegando que tenía …que hacerse macho.
La familia empezó a crecer hasta convertirse en una prole numerosa establecida en lugares diversos buscando el bienestar mayor para el niño. La pareja concibió otros 4 descendientes.
Celia, el 31 de diciembre de 1929.
Roberto, el 18 de mayo de 1932.
Ana María, el 28 de enero de 1934.
Juan Martín, el 18 de mayo de 1943.
Antes de que Ernestito pudiera caminar entró en la vida familiar una mujer que ejerció notable influencia en él y en todos los demás hermanos : Carmen Arias, se trataba de una española, de La Coruña, que atendía a los niños y niñas con tan especial devoción y tenía tan excelentes relaciones con Celia de la Serna , que los mismos parecían hijos de ella, a menudo debió resistir los reclamos de Guevara Linch, pues cuando el mismo iba a pegar una nalgada a uno de sus críos, invariablemente el golpe lo recibía Carmen pues buscaba la forma de que no tocara a la posible víctima, el padre, a veces ofuscado, le recriminaba su conducta. Ella aceptaba la reprimenda muy callada pero volvía a hacer lo mismo. La primera palabra que aprendió a decir Ernestito fue tete para identificar el chupete, entonces Carmen le empezó a llamar Teté el que no olvidó ese nombre nunca y en especiales condiciones lo utilizó para comunicarse con sus padres.
Guevara Linch sintió tanta admiración y respeto por Carmen Arias, que 40 años después de que hubiera atendido a sus hijos expresó que si tuviera que personalizar la lealtad lo haría sin duda con la persona de Doña Carmen Arias. Ella estuvo con los niños durante 8 años, pero de manera muy directa con Ernestito al que brindaba cuidados especiales. Al tener que abandonar a la familia Guevara de la Serna por su matrimonio con el también español de La Coruña, Alfredo Gabela lo hizo con profundo dolor y señalando a Robertico, llorando le rogaba a Celia…Señora cuídemelo mucho, esta despedida se produjo en la estación ferroviaria de Alta Gracia. La lealtad y amistad de Carmen y luego de su esposo, no fueron olvidados nunca, tanto que Gabela se fue a Uruguay a encontrarse con Ernestito en Punta de Este, Uruguay, varios años después… cuando ya Ernestito era el Che.
Algunas de las características de la familia Guevara de la Serna que no pueden ser ignoradas al estudiar la vida de Ernestito son las constantes mudanzas de los mismos, los diferentes lugares en donde se establecieron y su peculiar sentido de la vida, de Doña Celia y Don Ernesto. Algunos amigos de Ernestito y personas que sirvieron a la familia dicen que había discusiones delante del hijo mayor las que debieron afectarlo lógicamente y se especula en el sentido de que ante discusiones violentas de sus padres Ernestito aprendió el recurso de decir: Papá inyección, con lo que sus padres se olvidaban de la misma y le dedicaban toda la atención necesaria.
La pareja se desintegró aunque compartían el mismo techo y esa ruptura se hizo total posterior al nacimiento de Juan Martín, Ernesto Guevara Linch se une entonces a la maestra Ana María Erra Arredondo, 30 años menor que él y con quien funda una nueva familia, no obstante no contrae matrimonio con Ana María hasta después de la muerte de Celia ocurrida el 18 de mayo de 1965. De esta relación nacen Ana María, Ramón y Ramiro todos radicados en Cuba junto a su madre. Durante la enfermedad de Celia y su ingreso hospitalario Guevara Linch estuvo al lado de la que había sido su esposa y de los hijos de ambos hasta el final, menos Ernesto que estaba en el Congo en ese momento.
Quien aporta estos datos tuvo el privilegio de ser amigo de Don Ernesto Guevara Lynch hasta el final de sus días el 3 de abril de 1988, y tiene el de serlo actualmente de Ana María y sus hijos, dejo constancia de que expreso estas ideas precisamente por haberlo conocido, por respeto a su memoria. Guevara Lynch era un caballero y hablaba con devoción de Celia a la que seguía llamando mi mujer. Debo consignar que de estos temas nunca hablamos, ni formulé pregunta alguna, estos detalles los he conocido por vías diversas. Al respecto sólo recuerdo lo que me dijo refiriéndose a la muerte de Celia:
Murió sin decir Ay de dolor ni una vez. Ella formó el carácter del Che, insistió.
Al cumplirse 20 años la muerte de Don Ernesto hablé con Ana María Erra, recordamos algunas anécdotas del mismo, pronto ella cumpliría 68 años. En esa conversación me algo sorprendentemente histriónico de su esposo.
Podemos señalar por lo menos 12 lugares de residencia de Ernestito desde 1928 hasta su partida de Buenos Aires, que él no sabía definitiva, en 1953.
1. Entre Ríos 480 (Rosario)
2. Santa Fe y Guise (Palermo, Buenos Aires)
3. Caraguatay (Misiones) (Museo)
4. Calle Alem, a pocas cuadras del CASI, (San Isidro, (provincia de Buenos Aires)
5. Bustamante y Peña (Recoleta, Buenos Aires)
6. Plaza Hotel, frente a la plaza San Martín (Córdoba Capital)
7. Hotel "La Gruta", (Alta Gracia, Córdoba) (Junio de 1933)
8. Villa Chichita (Alta Gracia, Córdoba)
9. Villa Nydia (Alta Gracia, Córdoba) (Museo)
10. Chile 288, (Córdoba Capital) (1943)
11. Arenales No. 2208 y Uriburu (Recoleta, Buenos Aires)
12. Araoz 2180 (Palermo, Buenos Aires)
Ernestito no pudo asistir a la escuela, como sus hermanos y los demás niños, razón por la cual a principios de 1936 Celia recibió una comunicación del Ministerio de Educación argentino en el que se expresaba que Ernesto Guevara Serna de siete años cumplidos no figuraba inscripto en ningún establecimiento escolar, algo que lejos de molestarla la enorgulleció al saber que su país daba importancia a la Ley 1420, que establecía la educación laica, gratuita y obligatoria. Celia respondió explicando los problemas de salud de su hijo y se comprometió a seguir las tareas que indicara la escuela hasta tanto el niño estuviera en condiciones de asistir a la misma.
Ernestito no asistió a la escuela a recibir el primero inferior y primero superior, según Organización Escolar de ese país, cuando mejoró cursó en alguna medida segundo y tercer grado, en cuarto, quinto y sexto asistía cuando podía. Roberto era el encargado de traer las tareas que debía realizar su hermano mayor y devolverlas para su revisión, según expresión de Guevara Linch la maestra era Celia.
El niño asimilaba muy bien los contenidos escolares y además aprendió francés con su madre, de manera que cuando Ernestito tenía 12 años leía obras de autores franceses en ese idioma, descollaba por su amplia cultura y su actividad deportiva. Es este campo el que propicia, tiempo después su amistad con otro joven Alberto Granado, 6 años mayor que él pero de similares intereses. Esa amistad sería la más importante de todas las de Ernesto Guevara de la Serna.
Durante la infancia y adolescencia de Ernestito se produjeron numerosos hechos importantes que ejercieron notable influencia en su formación.
La Guerra del Chaco, enfrentamiento que se produjo entre 1932 y 1935 entre Bolivia y Paraguay por el dominio de un territorio llamado Chaco boreal, ambos países se disputaban su posesión estimulados por la posible presencia de yacimientos petroleros en lo que tuvo mucho que ver la Standard Oil Company yanqui, que azuzó a Bolivia para esa guerra.
En casa de la familia Guevara de la Serna se discutía muy frecuentemente de política pues en la casa recibían a muchas amistades de distintas procedencias y esas conversaciones eran seguidas con mucha atención por Ernestito a pesar de su corta edad, no se trata de sobredimensionar a una figura ya consagrada por la historia, sino que hemos podido comprobar, por vías diversas el elevado nivel de quien era todavía un niño, al respecto Granado nos comentó que en algunas ocasiones discutía con su amigo y este le ofrecía argumentos que el ignoraba a pesar de ser 6 años mayor, lo que atribuye Granado a su dominio de la Lengua Francesa y al uso intenso que hacía de la bien nutrida Biblioteca personal de su padre.
Fue costumbre de la familia Guevara de la Serna hacer largas sobremesas en donde se hablaba de sus antepasados, entre los que había personalidades tan relevantes como un Virrey, así como de las vivencias de los bisabuelos de los chicos en California, la Primera Guerra Mundial, la Guerra Civil española y cuanto acontecimiento importante ocurriera, pues tanto Celia como Ernesto eran personas de elevado nivel cultural y político, es lógico que así sucediera con la Guerra del Chaco y que los chicos tuvieran sus iniciativas.
Muchos muchachos de Alta Gracia se organizaron para efectuar batallas en defensa de Paraguay y Bolivia, los defensores de Paraguay estaban comandados por Ernestito y sus hermanos acompañados de la célebre pandilla, los defensores de Bolivia estaban comandados por los hermanos Dante-Vidosa los proyectiles eran unos frutos grandes y pesados y naranjas ácidas que dejaban manchas permanentes en la ropa. A menudo aquellas riñas debieron ser disueltas con ayuda de adultos pues los pretendidos soldados se tomaban su papel muy en serio.
Cuando en 1935 se firmó la paz con que concluyó la guerra ellos también cesaron los combates. No es casual que Ernesto estuviera entonces del lado paraguayo pues conocía, por las tertulias que se efectuaban en su casa que toda la razón estaba de ese lado, que el Ejército paraguayo estaba debilitado así como que el Ejército boliviano estaba entrenado por el General Kunt que fue uno de los jefes alemanes que luchó en Europa en 1914, pero además contaban los gobernantes bolivianos de entonces con dinero y asesoramiento yanquis. Ernestito era consciente de eso.
Otro hecho de gran influencia en Ernestito, de lo que da fe su padre, fue la Guerra civil española que se produjo desde julio de 1936 hasta abril de 1939 y enfrentó a una parte del Ejército con el Gobierno Legítimo, los sublevados vencieron e instauraron la dictadura de Francisco Franco, Líder de los sublevados.
De casi todo el mundo el pueblo español recibió apoyo, en Alta Gracia, y otras partes de Córdoba, de la República Argentina en general, se organizaron Comités de ayuda a ese pueblo que defendía sus derechos frente a una coalición imperialista, Francia, Italia y Alemania por ejemplo, casi todos los pueblos de América apoyaron al pueblo español (Cuba se destacó).
Ernestito participó de manera activa en la campaña para ayudar al pueblo español, allí en Alta Gracia se refugió el español republicano Dr. Juan González Aguilar cuya casa era un centro de lucha en donde Ernestito participaba, realizando actividades acordes con sus 9 años y de manera muy responsable.
En forma alguna trataremos de mostrar al pequeño, como un niño perfecto, pues en realidad y a pesar de estar dotado de una inteligencia notable era eso: un niño, nos contó Don Ernesto que en una ocasión Teté le respondió en muy mala forma a su madre, el padre al oír aquella falta de respeto a Celia salió en busca del chico, pero al llamarlo el mismo huyó a sabiendas de que sería golpeado. El padre lo persiguió a caballo por aquel lugar lleno de árboles, llamándolo. No lo encontró.
Cuando habían pasado varias horas el padre contrató a otro niño, mayor que Teté y buen corredor, para que lo buscara. El chico contratado vendía dulces, aceptó el trato: debía traer a Teté y ganaría 5 pesos. Pronto lo localizó y lo llamó para darle un dulce a lo que el perseguido respondió que se lo tirara. Entonces Ezequiel, el perseguidor, corrió tras él pero cada vez que lo tenía cerca se le escapaba de entre las manos…Ezequiel tuvo que renunciar a sus 5 pesos.
Al contar a Don Ernesto lo sucedido, con mucho dolor por la pérdida de su presumible ganancia, Don Ernesto lleno de alegría, le pagó pues había comprobado la capacidad física y la voluntad de su hijo mayor. Ya de noche la angustia de Don Ernesto era insoportable, es el momento en que Celia le dice que no se preocupe, que ella lo vio salir con el aparatico para el asma y un pedazo de pan, que ella estaba segura de que volvería tan pronto sintiera hambre…tarde en la noche Teté entró comió y se acostó en silencio sin saber que su madre lo espiaba, la que fue a decirle a su marido que ya el niño había regresado.
En este trabajo anotamos algunas ideas que pudieran ayudar a formarse una opinión de cómo transcurrió la vida del niño Teté, entre juegos, excursiones, paseos, viajes por mar en el yate que tenía Don Ernesto, así como también en la famosa Catramina que conducía Celia, generalmente, y en la que viajaban todos los amigos de los hermanos Guevara de la Serna muy humildes, también el medio en que se desarrolló caracterizado por los enfrentamientos entre sus padres que algunos malintencionados exageran al decir que iban a la mesa armados cada con un revólver. Expresar la verdad histórica por parte nuestra es una forma de demostrar las insólitas y absurdas manipulaciones de los enemigos de Ernesto Guevara.
El joven Ernesto concluyó sus estudios pre-universitarios en 1946 en el Liceo Dean Funes, manifestó su interés por la Ingeniería, por estos tiempos practicaba Rugby, que exige mucho esfuerzo, participa activamente en manifestaciones antifascistas y tiene un empleo como especialista en Suelos, en donde rechaza la propuesta de funcionarios corruptos para que altere el resultado de los análisis de laboratorio que lleva a cabo, con lo que obtendría un buen dinero
Poco después, mientras trabajaba en la Dirección de Vialidad de Córdoba y matricula Ingeniería en la Universidad de Buenos Aires.
En marzo de 1947 enfermó de gravedad su abuela Ana Linch, persona a la que él quería de manera entrañable y con la que tenía una relación muy especial, lo abandonó todo y fue junto a su abuela a la que atendió personalmente durante 17 días viéndola languidecer impotente, hasta que la vio morir. Se trata de un hecho de trascendental importancia en la vida de Ernesto Guevara de la Serna que tendría gran repercusión en su futuro: decidió reorientar sus estudios por lo que matriculó medicina en la Universidad de Buenos Aires, es algo que lamentaron todos los que le conocían y sabían de sus posibilidades en la especialidad que desechaba.
Al tiempo que estudiaba las asignaturas correspondientes leía de una manera incansable, devoró según palabras de su hermano Roberto los 25 tomos de Historia Contemporánea del Mundo Moderno, así como también leyó autores tan diversos como Benito Mussolini, Josef Stalin, Jack London, Freud, Mariategui, Martí, Marx, una figura que lo deslumbró tanto que en sus días clandestinos en África realizó un esquema que le permitiría hacer una biografía del genial creador de la teoría marxista. Obviamente no tuvo tiempo para ello.
Su padre confesó que ya en 1948, Teté tenía una cultura más elevada que la suya, así como que lo provocaba para establecer discusiones que se hacían tan tensas que cualquiera que los oyera creería que estaban en una riña violenta. Teté se divertía a costa de su viejo, que era el que le había propiciado, a través de su formidable biblioteca, una cultura mas vasta que la de su padre.
Residiendo en Buenos Aires decidió realizar un viaje por el interior de su país, lo hacía sin recursos o con muy escasos recursos, así el 1 de enero de 1950 salió de Buenos Aires en su bicicleta con motor marca Cucchiolo para visitar a su amigo Alberto Granado en Córdoba la Capital y luego seguir a conocer de manera directa las más pobres y atrasadas provincias argentinas: Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Jujuy, Catamarca y La Rioja regresando por Mendoza. Este recorrido totalizó 4 500 kilómetros, con tanto éxito que de regreso los fabricantes del motor lo utilizaron como propaganda comercial a cambio de que revisarían el motor. Años después su padre encontró en su libreta de viaje notas muy interesantes, como por ejemplo esta íntima reflexión:
…no me nutro con las mismas formas que los turistas y me extraña ver en los mapas de propaganda de Jujuy, por ejemplo: el Altar de la Patria, la catedral donde se bendijo la enseña patria, la joya del púlpito y la milagrosa virgencita de Río Blanco y Pompeya... No, no se conoce así un pueblo, una forma y una interpretación de la vida, aquello es la lujosa cubierta, pero su alma está reflejada en los enfermos de los hospitales, los asilados en la comisaría o el peatón ansioso con quien se intima, mientras el Río Grande muestra su crecido cauce turbulento por debajo.
Durante ese viaje recibió ayuda en hospitales, casas de amigos, o amigos de sus amigos donde él siempre colaboraba. El panorama que contempló, en pocos meses, por el interior de varias provincias de su patria, sin duda alguna, ejerció notable influencia en su formación. Sobre este viaje Don Ernesto hace una amplia descripción en su ya citada obra.
Otro viaje que impactó decisivamente en Ernesto Guevara de la Serna, fue el que realizó en 1952 junto a su mas íntimo amigo, Alberto Granado Jiménez, que comprendió varios países y muchas más vicisitudes, por esos días ambos viajeros comprobaron en cada país la verdadera forma de vida de sus habitantes, las diferentes clases sociales, las enfermedades, la desatención de aquellas grandes mayorías, la injusticia de que eran objetos. Constataron como vivían las grandes masas de esos lugares visitados en casi un año, pero ahora no era dentro de Argentina sino dentro de Nuestra América… sería el primero.
Salieron el 29 de diciembre de 1951 de Córdoba en la moto de Granado, llamada Poderosa II. Luego de pasar por Miramar y Bariloche, entraron a Chile por el bello Lago Esmeralda. En Chile pasaron por Osorno, Valdivia, Temuco y Santiago donde dejaron la moto definitivamente averiada. Se dirigieron al puerto de Valparaíso desde donde viajaron como polizones en un buque carguero hasta Antofagasta. Desde allí por tierra, principalmente en camiones, visitaron la gigantesca mina de cobre de Chuquicamata para dirigirse luego a la frontera con Perú, subiendo la cordillera por la provincia de Tarata, en la región de Tacna, hasta al lago Titicaca. En abril llegaron al Cuzco, la antigua capital de Imperio Inca. Visitaron las ciudades incaicas del Valle Sagrado de los Incas y Machu Pichu y luego partieron hacia Abancay, capital de la Región Apurimac, donde visitaron el leprosorio de Huambo, cerca de la ciudad de Andahuaylas.
El 1 de mayo de 1952 arribaron a Lima donde establecieron una estrecha relación con el médico Hugo Pesce, conocido especialista en lepra, discípulo de José Carlos Mariátegui y dirigente del Partido Comunista Peruano, que habría de influir decisivamente en las decisiones que adoptaría Guevara, aun cuando ya para esa fecha el joven había sobrepasado, en política, al ilustre científico. De allí se dirigieron a Iquitos y colaboraron con el leprosario de San Pablo en las orillas del río Amazonas, donde médicos y pacientes les regalaron alimentos y una balsa bautizada "Mambo-Tango", en referencia al género creado por el cubano Dámaso Pérez Prado, mambo, y a la música tradicional argentina. En esa balsa continuaron su viaje navegando el río aguas abajo.
En ocasión de que le celebraran su cumpleaños 24, el 14 de junio de 1952 expresó, a modo de brindis, unas palabras para la Historia, aunque entonces nadie lo sabía:
Creemos, y después de este viaje más firmemente que antes, que la división de América en nacionalidades inciertas e ilusorias es completamente ficticia. Constituimos una sola raza mestiza, que desde México hasta el estrecho de Magallanes presenta notables similitudes etnográficas. Por eso, tratando de quitarme toda carga de provincialismo exiguo, brindo por Perú y por América Unida.
En la balsa llegaron hasta la población fronteriza colombiana de Leticia, donde se desempeñaron como entrenadores del equipo de fútbol del pueblo. Volaron en hidroavión a Bogotá, que atravesaba una época de Violencia, donde fueron arrestados pero prontamente liberados. En ómnibus se dirigieron a Caracas, capital de Venezuela, donde Granado obtuvo empleo en un leprosorio por recomendación de Pesce. Ernesto, por su parte, debía terminar sus estudios, por lo que decidió regresar a Buenos Aires, en un avión de carga, vía Miami, donde trabajó como empleado doméstico de una azafata y lavaplatos en un restaurante pues la nave debió permanecer allí alrededor de un mes y Ernesto estaba sin dinero.

El 26 de julio de 1952 se despidió de Alberto en el aeropuerto de Maiquetía emprendiendo un accidentado regreso a Buenos Aires, que concluyó el 31 de agosto de 1952, ya en su patria escribió esta sentencia que ilustra en que enorme medida influyó en él todo lo observado en Nuestra América, tanto que ya Ernesto no era el mismo Ernesto:
…el que escribió estas notas murió al pisar de nuevo tierra argentina. El que las ordena y pule, "yo", no soy yo; por lo menos no soy el mismo yo interior. Este vagar sin rumbo por nuestra "Mayúscula América" me ha cambiado más de lo que creí.
Al separarse de Granado en Caracas acordaron que Ernesto iría a Buenos Aires, y volvería para continuar juntos trabajando. Granado obtuvo para su amigo una plaza muy bien remunerada con salario de mil dólares mensuales, entonces no tan devaluados como ahora, además de algunas ventajas. Ernesto, poco después de llegar a Buenos Aires empezó a concretar la meta que se había impuesto: concluir sus estudios en mayo de 1953, lo que significaba que debía estudiar y aprobar 15 materias en sólo 7 meses, unido a que laboraba de nuevo con el Profesor Dr. Pisani, alergista de fama internacional que tenía gran estima por Ernesto.
A pesar de que debió enfrentar grandes dificultades, como una severa infección contraída al manipular viseras humanas contaminadas, sin protección, logró su meta y el 11 de abril de 1953 examinó con éxito su última asignatura: Clínica Neurológica. El 23 de junio de 1953 recibió el Pergamino que lo acreditaba como Dr. en Medicina, según el legajo 1058, registro 1116, folio 153.
Tratando de cumplir su compromiso con Alberto para ir a trabajar como Médico Residente en el Hospital para leprosos de Maiquetía, gestionó su visa para viajar a Venezuela, el Cónsul de ese país se la negó, Ernesto se alteró y se produjo una violenta discusión en la que el diplomático expresó que para viajar a Venezuela tendría que pasar por encima de su cadáver. El solicitante le ratificó que viajará a Venezuela de todas formas…cumplió su palabra.
La familia estaba tranquila, a pesar de la separación de los padres y la grave enfermedad que Celia padecía desde hacía muchos años porque Teté estaba con ellos, sin embargo Ernesto se involucró, con Carlos (Calica) Ferrer, en la organización de otro viaje que esta vez tendría repercusión internacional y definitiva.
Luego de organizar todo lo que pudieron, salieron el 7 de julio de 1953, desde Buenos Aires en tren hacia Bolivia, estaban todos los familiares reunidos en la Estación, Ernesto vestía ropa de camuflaje y Don Ernesto asevera que su hijo gritó: Aquí va un soldado de América, Calica Ferrer que lo acompañaba y los demás familiares de ambos expresan no haber escuchado esa expresión. Permanecieron varias semanas en La Paz en pleno proceso de la revolución iniciada en 1952 por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR). Allí conocieron a Ricardo Rojo, que luego integraría un grupo de viajeros argentinos que se iría ampliando. Ernesto y Calica siguieron camino a Puno, Cuzco y Machu Pichu, para luego dirigirse a Lima, donde volvió a ver al Dr. Pesce. De Lima viajaron a Guayaquil, Ecuador, en ómnibus.
En Guayaquil Ernesto decidió ir hacia Guatemala para ver la revolución que estaba liderando allí el coronel Jacobo Arbenz. Calica se separó de Ernesto embarcándose con "Gualo" García hasta Panamá permaneciendo allí unos meses, en condiciones económicas críticas. De allí cruzaron a Costa Rica, luego Nicaragua en botella, como decimos los cubanos. Allí se encontraron con Rojo y los hermanos Walter y Domingo Beveraggi Allende, continuando con este último, en auto hacia Guatemala, pasando por Honduras y El Salvador. El 24 de diciembre de 1953 llegó sin dinero, algo común, a Guatemala en donde sería testigo de la gestión de gobierno de Arbenz y de su incapacidad para defender su Proyecto tibiamente antiimperialista.
Por este tiempo había un reducido grupo de cubanos radicados en Guatemala pues habían tenido que huir de la represión que ejercía Fulgencio Batista, a través de un Ejército bien pagado por él. Entre estos cubanos está Antonio (Ñico) López Fernández que había participado en las acciones del 26 de julio en Bayamo, es un cubano muy jovial que tiene una elevada cultura política y clara conciencia de cuales son los problemas reales que enfrentan los pueblos de América Latina. Ñico conoce a una economista peruana, exiliada igual que él, con quien comparte sus inquietudes políticas que son coincidentes: Hilda Gadea Acosta. Allí Ernesto conoce a Hilda y es esta quien propicia el encuentro de Ernesto con Ñico y los demás cubanos.
Entre Ernesto e Hilda surge un romance en medio de las discusiones que sobre temas de índole política, filosófica, etc sostienen ambos, Ernesto por ese tiempo no ha definido totalmente su camino, Hilda influye de manera notable en que lo encuentre, la relación amorosa pasa por momentos difíciles pues Hilda Gadea Acosta, es unos años mayor que Ernesto y es además una mujer de poca belleza en el sentido tradicional de la palabra, es sin embargo, una mujer de sólida cultura y principios, de ideas francamente socialistas que se ha enamorada del argentino, lo que expresa sin recatos ni hipocresías. Era una mujer excepcional.
Cuando se produce la caída de Arbenz, Ernesto debe salir precipitadamente de Guatemala pues ya la CIA lo tenía expedientado junto a algunos cubanos e Hilda. El 21 de setiembre de 1954 concluye su viaje con la llegada Méjico.
Logra trabajar como Médico Ayudante en la Sala de Alergia del Hospital General de Méjico en donde puede comprobar de nuevo la situación de los desposeídos de estas tierras, allí atiende a una paciente, María, que padece una enfermedad que se ha agudizado enormemente por falta de atención el comprueba que ya no hay nada que hacer, a esa anciana humildísima le dedica un extenso y comprometido poema que titula Vieja María, el que en una de sus partes dice:
Restriega tus cayos duros y los nudillos puros
en la suave vergüenza de mis manos de médico.
Escucha abuela proletaria:
cree en el hombre que llega,
cree en el futuro que nunca verás.
Ni reces al dios inclemente
que toda una vida mintió tu esperanza,
ni pidas clemencia a la muerte
para ver crecer a tus caricias pardas;
los cielos son sordos y en ti manda lo oscuro;
sobre todo tendrás una roja venganza,
lo juro por la exacta dimensión de mis ideales
tus nietos todos vivirán la aurora…
Ya el Médico está definitivamente formado y ha tomado partido, como José Martí, con los pobres de la tierra. Allá en Ciudad Méjico en los bajos de un hotel, Raúl le presenta a su hermano recién llegado de Cuba, Fidel Castro al Médico argentino los que conversan toda la noche… era mediados de julio de 1955, sobre este hecho Ernesto comentó a Hilda, ya convertida en su esposa:
-Tenía razón Ñico en Guatemala cuando nos dijo que si algo bueno se ha producido en Cuba desde Martí, es Fidel Castro; él hará la revolución.
También expresó al respecto, en otro momento allí en Méjico:
Un acontecimiento político es haber conocido a Fidel Castro, el revolucionario cubano, muchacho joven, inteligente, muy seguro de sí mismo y de extraordinaria audacia; creo que simpatizamos mutuamente.
Fueron llegando otros cubanos a todos los cuales Ernesto, como es costumbre argentina les decía che, igual que los cubanos decimos compadre, socio, compañero, etc, los cubanos le tomaron afecto al médico que se había unido a ellos y dejado a Granado en Caracas esperándolo para que asumiera un muy prometedor destino. Ñico lo bautizó Che (que significa Hombre en Guaraní) apelativo que el argentino aceptó lleno de gozo pues nunca renunció a su patria chica, a su condición de porteño, ni a la sencillez con la que él firmó papeles valiosos.
En ese momento Ernesto Guevara de la Serna, tenía ante sí la posibilidad de un brillante futuro como hombre de ciencias al que sin dudas la suerte favorecería, tiene además sólo 27 años recién cumplidos. Lo que sucedió después es parte de la más sustanciosa historia de América, en este hombre habían convergido diversas influencias que le posibilitaron forjar una personalidad firme como para tomar decisiones tan arriesgadas que le permitieron abordar un yate tambaleante, sin medicamentos, y emprender una empresa descomunal, para liberar un país al que no conocía, quizás desde entonces ya él había comprendido algo que confesó más tarde:
-Todo lo bueno que yo tengo me lo dio mi mamá.
Alberto Granado ha afirmado con toda razón que sin Fidel Castro, no habría existido Ernesto Guevara, pues no habría existido el Granma, el desembarco, 25 meses de guerra dificilísima en la Sierra Maestra y claro está, que tampoco habría existido la Campaña de Las Villas dirigida por el Che, conforme a las instrucciones de Fidel Castro. La notable influencia de Fidel Castro se puede apreciar en su carta de despedida en donde le afirma, por ejemplo, que si la hora definitiva le llega bajo otros cielos: …mi último pensamiento será para ti. En el umbral de la muerte no se dedica el postrer pensamiento a alguien que no resulte entrañablemente respetado, admirado y querido.
Queda claro que en la formación de Ernesto Guevara incidieron numerosos factores positivos y negativos, de ese proceso surgió el hombre mas perfecto de esta era según un prestigioso intelectual, hay que tener en cuenta, sin embargo que el niño Teté era de nacimiento excepcional.
En nuestras experiencias en el trabajo con escolares de distintos niveles de educación hemos constatado que es imprescindible tratar con los escolares al Ernesto que tenga su edad aproximadamente, despojado de todo endiosamiento. Entregarles al Teté que tenía una pandilla, se rebelaba ante castigos de sus padres que el consideraba injustos, quienes eran sus amigos y por que.
El Ernesto que hemos llevado a los niños de cuarto a sexto grado en la Escuela Celia Sánchez de esta ciudad de Santa Clara ha ejercido notable influencia en los mismos y les ha hecho tener variadas experiencias.
Hemos desarrollado el Círculo de Interés Amiguitos del Che, conforme a las edades e intereses de los Pioneros, siendo significativo el apoyo recibido de los padres para llevar a cabo actividades incluso en los periodos vacacionales.
Este equipo está integrado por:
Odalys Fraga Luque.
Ismary Fernández
Fernando
Angel Rodríguez Cuba
Odalys Medina Guevara
Arístides Rondón Velásquez.


Lic. Arístides Rondón Velázquez.
Diciembre 2008

ACABO DE LLEGAR DE LA COMANDANCIA DEL CHE EN EL ESCAMBRAY

ACABO DE LLEGAR DE LA COMANDANCIA DEL CHE EN EL ESCAMBRAY.
Estas son las vivencias de un viaje a la memoria que yo dedico a mi familia argentina y española así como a todas las personas que reconocen la grandeza del Che, especialmente a mis sobrinas y sobrino argentinos Luisina, Camilo y Olivia.

A las 7 de la mañana del día 4 de diciembre del presente salimos un grupo de guevarianos de la Ciudad del Che con destino a Caballete de Casa intrincado lugar de las serranía del Escambray en donde el Che estableció su Comandancia, derrotó una ofensiva del enemigo y creo una infraestructura admirable, en aquellas remotas y abruptas montañas… nada fácil llegar cuando se tienen 60 años pero llegué, los invito a que me acompañen.
Aproximadamente a las 12 del mediodía llegamos al municipio de Fomento pueblo que fuera tomado por el Che el 16 de diciembre de 1958 visitamos varios lugares históricos pero a mi el que mas me impresionó fue el Obelisco ubicado en la Plaza Central en el que están escritos los nombres de todos los mártires caídos durante la lucha en la localidad. Abordamos de nuevo los transportes y fuimos hasta una zona rural próxima al Pedrero lugar íntimamente ligado al inolvidable Che Guevara. Resultó impresionante observar el cuidado que reciben allí los lugares históricos, entre ellos una urna, celosamente protegida, que contiene un documento histórico que transcurridos 100 años podrá ser abierta, hecho que sucederá dentro de 50 años pues ya ha transcurrido la mitad del plazo establecido, igualmente la tarja que recuerda el lugar aproximado en el que Ernesto Guevara, Líder del Movimiento 26 de julio en Las Villas y el Comandante Faure Chomón, Líder del Directorio Revolucionario 13 de Marzo, suscribieron el conocido Pacto del Pedrero el 1 de diciembre de 1958.
Llama enormemente la atención la Escuela Rural de ese pequeño poblado próximo al Pedrero que con una reducidísima matrícula de menos de 10 escolares cuenta con modernos medios como computadora (ordenador), televisor, y maestros de tres especialidades. Los niños campesinos bien vestidos y nutridos nos ofrecieron una Gala Artística sencillísima pero de una enorme carga emotivo por estar dirigida a homenajear al Che. Desde allí partimos pasado el mediodía, atravesamos el poblado el Pedrero que fuera destruido por las hordas genocidas de Fulgencio Batista luego de que las mismas fueran destrozadas por las fuerzas del Che en la ofensiva que se había iniciado el 29 de noviembre de 1958 y que justamente 50 años atrás el 4 de diciembre de 1958 había concluido con una gran victoria del Argentino. Aquellos asesinos castigaron a la población asesinando civiles e incendiándoles las casas como represalia por la ayuda que le prestaban a los revolucionarios. A partir de ahí las emociones serían permanentes.
Transitando por las estribaciones del lomerío poco después de un colosal aguacero empezamos a ascender, el carro daba verdaderos saltos al tiempo que el joven Amet, chofer muy experimentado nos tranquilizaba diciendo que él tenía muchas horas de trabajo acumulado, así llegamos a Gavilanes preguntando por Pupo, El Arriero del Che, se nos informó que nos esperaba más adelante. Allí almorzamos como le gusta a Alberto Granado y Delia su esposa, en campaña cerca de un río y bajo un árbol. Visitamos el Museo de la Columna 8 Ciro Redondo en donde se conserva perfectamente uno de los mulos que utilizó el Che en la Sierra. Fuimos atendidos por especialistas muy calificados que tienen grandes proyecciones de trabajo y un entusiasmo a toda prueba. Es el lugar histórico considerado con el fin de la Invasión dirigida por el argentino.
Un Guía nos condujo al lugar exacto en donde concluyó la Invasión que desde El Jíbaro, en la Sierra Maestra en el oriente cubano había dirigido el Argentino hasta Gavilanes en El Escambray para lo cual debió transitar con sus 131 hombres, un norteamericano incluido, 677 kilómetros para lo necesitó sólo 50 jornadas. Es imposible describir la hazaña, quizás el Che lo reflejó de manera exacta al decir que ya sus hombres eran un Ejército de Sombras. A las inclemencias del tiempo (dos huracanes) se unía la falta de prácticos, las plagas, la carencia de alimentos y medicinas. Sólo hombres así, que tuvieran un Jefe como el Che podían realizar semejante hombrada. Vamos a seguir viaje…
Luego de un recorrido de más de una hora para transitar un pequeño trecho llegamos a las estribaciones de Caballete de Casa en cuyo intrincado lugar vive desde que nació, El Arriero del Che. Algunos ya lo conocíamos. Fue una conversación íntima y emotiva que trataremos de describir pues nadie tomó nota aunque un aficionado hizo un pequeño vídeo que luego les mostraremos.
Le preguntamos ¿Por qué usted se convirtió en el Arriero del Che?
-Cuando el Che llegó aquí pidió un Práctico para que le localizara un lugar donde hubiera agua abundante y bosque, Domingo, un amigo mío salió a buscar el lugar pero no lo encontró estando el Che allí en Gavilanes Domingo le dijo que el creía que allá en Caballete de Casa, un lugar muy intrincado del que le habían hablado podía ser el lugar que el buscaba. En ese momento Che dice ¿Hay aquí algún campesino que me pueda servir de práctico para ir a Caballete de Casa? Yo dije este es mi momento y rápido le respondí: Yo puedo. Los llevé.
Poco después fui a verlo allá a Caballete de Casa para incorporarme a la Guerrilla, él me preguntó ¿Quién tiene arria de mulos por aquí? (Animales propios para trasladar cargas en lugares difíciles) yo le mencioné una persona que tenía dos arrias de mulos, él le dijo a Armando (luego Comandante Armando Acosta) toma nota y cítamelo para acá. Yo mismo llevé el papel, el hombre me preguntaba que pasaba y yo le decía, a mí sólo me mandó el Che a darte el papel. El hombre fue a ver al Che diciéndole que no podía venderle las dos arrias de mulos pero que le prestaba una de sus las dos que tenía hasta que terminara la guerra.
Ya con los 6 mulos del arria bien preparados el Che me llamó y me dijo que mi trabajo en la guerra sería ser arriero, que me encargaría de traer desde donde fuera indicado lo que se me entregara, armas, comida, medicinas, madera. Entonces me dijo desde ahora te entiendes con Ramiro. Hablé muy poco con él Che después, mi trabajo era con Ramirito (Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez). Un día me pasó cerca y me gritó que no sólo con balas se hacía la guerra. El estuvo poco aquí porque se fue a tomar otros pueblos. Después del triunfo de la Revolución yo estuve cuidando el Campamento del Che 17 años, manteniéndolo todo tal y como estaba en la guerra. Luego se llevaron muchas cosas para los museos pues allá arriba era muy difícil que se vieran, como la Planta de Radio y otras cosas, pero las casas las conservamos, ahí verás la Comandancia que bien se conserva.
Ernesto, un joven estudioso de la vida del Che, le preguntó que por que él se había quedado allí en condiciones tan difíciles, a lo que él respondió:
-Cuando se acabó la guerra a mi me querían llevar para el pueblo, pero yo lo que quería era trabajar la tierra, entonces me dieron dos caballerías de tierra y Ramirito mandó a hacerme esta casa. De aquí sólo me voy si tengo que ir a cumplir otra misión que me de Ramirito.
Le pregunté si era posible acampar allí en sus predios me dijo que sí, nos dio las facilidades que pudo e invitó a las mujeres a que durmieran en su casa, en la que reside con su nieto. Yo conocía a su esposa de otros viajes y le pregunté si estaba sólo, fue entonces que se sentó, entre tanto sus 40 admiradores permanecíamos en silencio, su voz se hizo más débil más íntima para decirme que hacía 7 meses su esposa (También colaboradora del Che) había fallecido, que la extrañaba mucho pues fue por aquellos días que se conocieron y unieron sus vidas. El hombrón de 71 años me pareció más grande.
A este pedazo de la historia de Cuba se le conoce por Pupo, cuando en realidad se nombra Ernesto Gonzalo Pino Fábregas, pero siendo un niño de 2 ó 3 años al pasarle delante a un tío este le puso la mano en la cabeza y le dijo pupito…luego ya no era pupito sino Pupo. Resulta admirable por su sencilla grandeza, no alardea de haber servido al Che, refiere que este le indicó como jefe a Ramiro, y expresa que sólo pocas veces habló con el Jefe Guerrillero.
La noche del 4 de diciembre no hubo silencio en torno a la casa de Pupo, cantamos himnos y marchas, hicimos anécdotas de la guerra…y nos preparamos para, al amanecer, subir a la Comandancia del Che. Yo subí. ¿Me acompañas?
Se trata de ascender 2 500 metros con inclinaciones espectaculares que obligan al caminante a hacer maniobras para mantener el equilibrio. Alguien me facilitó un madero que usé todo el tiempo como bastón, el terreno resbaladizo por la lluvia, el cansancio todo hacía difícil el ascenso, pero había que llegar a la Comandancia del Che. En aquellas elevaciones debimos cruzar el mismo río varias veces, tratando de impedir, casi siempre inútilmente mojarnos los pies pues los puentes son las piedras que mojadas son una trampa que producen temor a caer. En cada uno de los pasos yo tomé agua, estaba muy fría y recordaba que el Arriero del Che me había dicho:
-Agua corriente no mata gente.
Una de las razones de situar el campamento en aquellas alturas era precisamente la abundancia de agua.
Luego de caminar alrededor de 2 000 metros empezamos a encontrar instalaciones rústicas, como todas las que forman el Campamento pues fueron construidas con los materiales aportados por la naturaleza. Así llegamos al lugar donde radicaba la primera Posta, más adelante, la construcción en donde estuvo la Planta de Radio, entre otras construcciones. Sin embargo cuando llegamos al amplio Bohío que sirvió de Comandancia al Che, se apoderó de nosotros una sensación de nostalgia. Allí había estado el Che y sus más cercanos colaboradores, un hombre con un padecimiento tan traumático como asma, en medio de aquel ambiente hostil, frío, perseguido por tres batallones de soldados batistianos. Alguien dijo y pensar que no nació en Cuba. Debí interrumpir mi silencio y decir que para el mundo era el que creo la naturaleza, las parcelas en que el hombre lo ha dividido artificialmente, no convencía al Che de ser extranjero, sin ignorar que adoraba el pedacito de patria en que nació y por el que quiso luchar.
Allí a un costado de la Comandancia y su Refugio hicimos un receso y hablamos de lo que había ocurrido exactamente 50 años antes el 5 de diciembre de 1958 en que el Che fue herido y que con esa ecuanimidad tan poco común y respaldado por su condición de médico se dio por muerto a sí mismo y empezó a esperar la muerte recordando un cuento de Jack London. Ismary Fernández, Especialista Principal del Complejo Escultórico memorial Ernesto Guevara, y quien escribe estas líneas explicamos a los expedicionarios la difícil situación política encontrada por el Che en el Escambray en donde había varios grupos luchando contra Batista. Es imprescindible destacar que en esos días brilló el Che como negociador pacífico con los otros grupos, uno de los cuales no se le unió, sólo uno. En esa Comandancia sucedieron muchas cosas que sin duda ningún cronista tuvo tiempo de recoger en medio de la guerra.
Desde la Comandancia seguimos ascendiendo, hay otras construcciones subir se tornaba difícil, debí recibir ayuda de una joven para ascender 4 ó 5 metros empinadísimos y llegué a la cima a lo más alto.
Allí en medio de la bruma era imposible ver el resto de las montañas, para mí fue un regalo al Che, al que nunca le pagaremos todo lo que hizo por la humanidad, un homenaje, una prueba. Sentado sobre una gran roca descansé, tome agua, un traguito pequeño de Ron que me supo a Cuba Libre, y me sentí motivado a escribir estas notas sin ser escritor, igual que me había atrevido a ascender hasta aquel santuario revolucionario sin ser guerrillero, logré llegar porque el Che me impulsaba, si no llegaba a la cima ¿Cómo iba a volver a Santa Clara en donde nos espera siempre el Che?


Lic.Arístides Rondón Velázquez